El arranque de las semifinales de la III Liga Élite del Béisbol Cubano no pudo haber sido más dramático para el equipo de Industriales, que vio escaparse una valiosa victoria en el juego uno ante Ciego de Ávila, tras un error que marcó el curso definitivo del encuentro. En un estadio José Ramón Cepero abarrotado de emoción y expectativa, los locales se impusieron con un apretado marcador de 10×9, luego de un episodio fatídico en el octavo inning que desmoronó las aspiraciones de los Leones capitalinos.
El juego se encontraba en una etapa crítica. Ciego de Ávila dominaba el marcador 8×5, pero todavía quedaba mucho por decidir. Fue en ese octavo capítulo donde la historia tomó un giro inesperado. Industriales, con la presión a cuestas, hizo ingresar a uno de sus jugadores más confiables a la defensa, el jardinero central Roberto Acevedo, conocido por su buen desempeño con el guante. Sin embargo, el destino le tenía preparada una amarga jugada que lo convertiría en protagonista involuntario de una de las acciones más costosas del torneo hasta ahora.
Todo se desencadenó luego de que el lanzador Luis Caser lograra un importante ponche ante Leonelkis Escalante, lo que parecía augurar una entrada sin mayores complicaciones. No obstante, el siguiente bateador, el experimentado Frederich Cepeda, respondió con un potente doblete por el jardín derecho. Ante esta amenaza latente, el cuerpo técnico de Industriales decidió otorgarle base por bolas intencional a Yordanis Samón, evitando enfrentarlo y buscando el doble play ante Robert Luis Delgado.
Fue entonces cuando ocurrió el error que cambió el destino del juego. En conteo de dos bolas y dos strikes, Delgado conectó lo que parecía un elevado cómodo al jardín central. Acevedo, en posición para hacer el out, perdió de vista la pelota momentáneamente, afectado por la intensa luz solar. Aunque intentó recomponerse y ubicarse para atrapar la esférica, no lo hizo con la precisión necesaria. La pelota, tras golpear su guante, cayó al suelo y desató el caos.
Lo que debió ser el segundo out del inning se transformó en una amenaza inmediata para Industriales. Con las bases llenas tras la jugada, el lanzador Caser no logró reponerse del golpe anímico y otorgó un boleto a Tailon Sánchez, lo que permitió una carrera más para los avileños. Luego, un elevado de sacrificio conectado por Fernando de la Paz trajo otra anotación, estirando la diferencia a tres carreras. Aunque Industriales reaccionó ofensivamente en el cierre del noveno, no fue suficiente para borrar el impacto del error cometido por Acevedo.
La acción, sin duda, se inscribe como una de las más decisivas del partido y quizá del cruce semifinal. Un momento desafortunado que empañó el esfuerzo colectivo y que dejó a Roberto Acevedo marcado como el protagonista negativo de la noche. Si bien el béisbol es un deporte de equipo, hay instantes en los que una sola jugada puede cambiarlo todo, y eso fue exactamente lo que ocurrió en el José Ramón Cepero. Industriales tendrá que recomponerse rápidamente si desea revertir la serie, pero esta derrota, sin duda, dejará una huella difícil de borrar.