CONOCE AL NUEVO MANAGER DEL EQUIPO CUBA PARA CLASICO MUNDIAL 2026

La reciente culminación de la tercera edición de la Liga Élite del Béisbol Cubano no trajo consigo grandes emociones ni aportes reales al desarrollo del deporte nacional. Más allá de la victoria de los Tigres de Ciego de Ávila, el torneo no cumplió las expectativas, y dejó la sensación de haber sido un evento forzado, carente del nivel competitivo y la participación de figuras destacadas que justificaran su realización. No obstante, lo que sí generaba expectativa era el anuncio del nuevo manager del Equipo Cuba, de cara al Clásico Mundial de Béisbol 2026.

Durante semanas se ha especulado sobre quién ocupará el cargo de director del equipo nacional. Aunque todo indica que la decisión ya fue tomada desde hace tiempo, el anuncio oficial continúa demorado, generando desconcierto y malestar entre los aficionados y especialistas del béisbol en la isla. A pesar de que la propia prensa oficialista ha confirmado que la Federación Cubana de Béisbol ya tiene elegido al manager, este nombre permanece en el anonimato, envuelto en un secretismo que no sorprende, pero sí incomoda.

En medio de la incertidumbre, circularon múltiples versiones en redes sociales, algunas más especulativas que otras, sobre las razones detrás del retraso. Para entender mejor la situación, se consultó a una fuente cercana a la Federación, quien ofreció detalles reveladores. Según esta persona, en la reunión celebrada el miércoles 11 de junio en el Estadio Latinoamericano con la prensa, el tema del manager fue abordado superficialmente, sin ofrecer información concreta. De acuerdo con su testimonio, aunque se discutieron varios temas relevantes, el asunto del director del Equipo Cuba no fue esclarecido en profundidad.

La explicación que brindó la fuente va más allá de un simple retraso administrativo. Según afirmó, la decisión ya está tomada desde hace tiempo, pero aún no puede hacerse pública porque debe recibir el visto bueno de instancias superiores, es decir, del gobierno cubano. “Eso se subió a las instancias correspondientes, realmente no depende del comisionado. No se puede anunciar todavía hasta que tengan el visto bueno”, comentó. Estas declaraciones confirman lo que muchos sospechan: que en Cuba, más allá de la capacidad profesional del elegido, el nombramiento del manager del equipo nacional responde a criterios políticos y no meramente deportivos.

Esta forma de proceder no es nueva en el deporte cubano. A lo largo de los años, se ha visto cómo decisiones importantes dentro del béisbol —y del deporte en general— están fuertemente condicionadas por aprobaciones institucionales que van más allá del ámbito deportivo. Esto no solo retrasa procesos clave como la conformación del cuerpo técnico del Equipo Cuba, sino que también mina la confianza de la afición, que espera transparencia y meritocracia.

A medida que se acerca el Clásico Mundial de Béisbol de 2026, la falta de claridad sobre la dirección del equipo representa una debilidad. El béisbol cubano necesita liderazgo, planificación y profesionalismo. La demora en oficializar al manager es otro reflejo de los problemas estructurales que enfrenta el deporte en la isla, donde las decisiones importantes siguen dependiendo de factores externos al terreno de juego.