AROLDIS CHAPMAN PROTAGONIZA LAS ULTIMAS NOTICIAS DE LA MLB

Aroldis Chapman sigue escribiendo su nombre con letras doradas en la historia de las Grandes Ligas. A sus 37 años, el cerrador cubano de los Boston Red Sox ha logrado una temporada que lo coloca entre los relevistas más dominantes de todos los tiempos. Con una efectividad de 1.17, 32 salvamentos y 85 ponches en 61.1 entradas, el “Misil de Holguín” demostró que su poderío desde la lomita no ha perdido fuerza y que su lugar entre los grandes está más que asegurado.

Chapman se convirtió en apenas el 11.º lanzador en la historia de la MLB que logra una campaña con al menos 30 juegos salvados y un promedio de carreras limpias igual o menor a 1.20. Una hazaña que solo nombres legendarios han podido alcanzar, como Dennis Eckersley, Fernando Rodney, Craig Kimbrel o Zack Britton. Pero lo más impresionante es que Chapman es uno de los pocos en hacerlo a una edad tan avanzada, compartiendo ese honor con Kirby Yates, quien también lo consiguió con 37 años.

El cubano ha mantenido su característica recta de fuego, superando constantemente las 100 millas por hora, y su control se ha afinado con la experiencia. Esta temporada, su WAR fue de 3.5, el más alto de su carrera, superando incluso el rendimiento de leyendas del relevo en sus mejores años. Su consistencia y su capacidad para responder en los momentos más tensos lo han convertido en una pieza clave para los Medias Rojas, un equipo que ha vuelto a soñar con grandes aspiraciones gracias a su solidez en el bullpen.

En el panorama histórico, Chapman se une a un grupo verdaderamente selecto. Es uno de solo cuatro lanzadores en toda la historia de las Grandes Ligas con 360 o más rescates y una efectividad igual o inferior a 2.55. Los otros tres son íconos del béisbol: Mariano Rivera, Billy Wagner y Jonathan Papelbon. Alcanzar esos números lo consolida como uno de los mejores cerradores de todos los tiempos.

Con 367 juegos salvados y una efectividad vitalicia de 2.52, Aroldis Chapman no solo ha resistido el paso de los años, sino que sigue dominando como en sus mejores tiempos. Su legado, forjado a base de velocidad, disciplina y coraje, continúa creciendo. Y lo más impresionante: su historia aún no ha terminado.