AROLDIS CHAPMAN REVELA TRUCO DE COMO LANZAR 100 MILLAS

Aroldis Chapman, a sus 37 años, sigue siendo un fenómeno físico dentro del béisbol moderno. Pese al paso del tiempo, el cubano continúa lanzando rectas que superan las 100 millas por hora, un privilegio reservado para pocos en la historia de las Grandes Ligas. Su secreto, sin embargo, no está en un régimen de pesas extremo ni en rutinas milagrosas, sino en la constancia, la disciplina y el cuidado meticuloso de su cuerpo.

El cerrador zurdo, uno de los más dominantes de su generación, reveló recientemente detalles sobre su preparación física, desmintiendo uno de los mayores mitos entre los lanzadores jóvenes: que levantar pesas pesadas es la clave para alcanzar velocidades de tres dígitos. “La gente piensa que las pesas te van a hacer tirar las 100 millas por hora, pero tampoco es así. Las pesas ayudan a fortalecer y prevenir lesiones, pero no te hacen más rápido por sí solas”, explicó el pelotero antillano.

Chapman, conocido por su potencia y consistencia, aseguró que su enfoque siempre ha estado en el equilibrio entre fuerza y flexibilidad. “Hay lanzadores que sienten dolor en el bíceps, tríceps o el hombro, y creen que solo levantando más peso lo van a solucionar. En realidad, se trata de cómo cuidas tu cuerpo, cómo haces tus movimientos y cómo descansas”, añadió.

Esa filosofía de trabajo lo ha mantenido alejado de las lesiones graves desde 2022, cuando una infección cutánea lo obligó a una breve pausa en su paso por los Yankees. Desde entonces, ha pasado por varias organizaciones sin volver a estar en lista de lesionados, demostrando una durabilidad admirable para su edad y rol dentro del bullpen.

Incluso en junio de 2025, cuando abandonó un juego ante los Dodgers por molestias en la espalda, Chapman regresó al montículo pocos días después sin presentar secuelas. Su enfoque, dice, está en escuchar al cuerpo y actuar antes de que un pequeño malestar se convierta en un problema serio.

“Si tienes un brazo fuerte y haces las cosas bien, es muy difícil que te vean con dolor en el codo o en el hombro”, afirmó. Con esa mezcla de experiencia, autodisciplina y mentalidad competitiva, Aroldis Chapman sigue siendo el ejemplo perfecto de cómo el poder y la longevidad pueden convivir en el béisbol de élite.